Las comunidades de vecinos deberán instalar contadores individuales para conseguir las máximas subvenciones a la calefacción

Tras la aprobación el pasado martes del nuevo Plan de Contingencia Energética, el Gobierno acaba de anunciar una nueva serie de medidas que impactan de manera directa en los consumidores. Concretamente a las comunidades de vecinos que dispongan de calefacción central, o lo que es lo mismo a más de 1,3 millones de hogares. Para poder acogerse a la nueva tarifa regulada de gas que conseguirá ahorrar hasta un 50% en la factura, deberán cambiar todos los contadores por unos individuales antes de septiembre de 2023.

Según el decreto-ley, están obligadas a ello las comunidades que se edificaron antes de la primera implantación de contadores individuales (año 1981). Aquellas que no realicen este cambio, sufrirán un recargo del 25% sobre esta nueva tarifa. Sin embargo, son muchas las comunidades que no disponen de recursos económicos para realizar estas reformas. Esta inversión supone un cuantioso coste que afectará directamente en los bolsillos de todos los vecinos. Además, también se les exigirá una declaración responsable en la que se comprometen a este cambio a la hora de solicitar la nueva TUR vecinal y estar al día en la revisión de la caldera.